miércoles, 27 de junio de 2012

Si tiramos la toalla, que sea para ducharnos juntos.



No siempre lo que necesito es lo que quiero, lo que quiero no siempre es lo que encuentro; lo que encuentro no siempre es lo que busco, lo que busco no siempre es lo acertado y lo acertado, no siempre es lo que me hace feliz. Porque lo atractivo no siempre es lo más bello, quizás porque no siempre dormir significa que descanses; porque podemos soñar despiertos. Porque una mirada dice más que mil palabras, porque los silencios duelen más que las palabras. Porque se puede andar perdido aunque conozcas el camino, porque hay días tan oscuros como la noche y noches que brillan más que el día, porque hay días para todo y porque todo a veces es nada, y porque otras veces nada, lo es todo. Quizás porque hay quienes te tienen delante y no te ven y quienes te han visto sin mirarte; porque el mismo abrazo que adoro me ahoga, pero aunque me ahoga me atrapa, será porque no siempre correr significa llegar más lejos. Porque lo más pequeño, en ocasiones, es lo más grande. Porque lo más frágil y ligero será lo más pesado y en ocasiones uno se salta sus propias reglas, para después poder cumplirlas, porque a veces aunque se pierda, se gana, y porque hay victorias que son derrotas..
No trates de correr por alguien que no daría ni un paso por ti, vive el momento, piensa que la vida dura poco, que los buenos momentos de hoy, son los malos pensamientos del mañana. Que quien realmente te merezca sabra valorarte, y si te equivocas ... Da igual, hay errores que es un placer cometerlos.


domingo, 24 de junio de 2012


Gracias por estar a mi lado todo este tiempo, no sabes lo agradecida que estoy de tenerte a mi lado.


A veces la persona a quien más quieres, es por quien más sufres.
Contigo, puedo llorar de alegría y de tristeza. Puedo sentirme la chica más afortunada del mundo por tenerte a mi lado o puedo sentirme la cosa más insignificante de este planeta sólo por cómo me tratas en ciertos momentos. Por pensar en el "¿qué soy para ti?" puedo levantarme un día con la más amplia sonrisa e inigualable brillo en los ojos y acostarme llenando de lágrimas la almohada, o bien al revés.
Pregúntalo todas las veces que quieras, la respuesta seguirá siendo que te quiero... Por muchas peleas que tengamos, todos tenemos un tiempo de aguante, un tiempo hasta que reventamos de rabia y de nuestra boca sale la palabra "basta".
Atento a mis palabras, son las de una chica que te quiere pero que se desespera. Que ríe contigo y llora por ti.

martes, 19 de junio de 2012

Si la vida te da la espalda tocale el culo

Es curioso ver las lecciones que te da la vida, sin esperar nada ni nadie al final pasa algo que altera tu presente, pero sobre todo tu futuro. Hay que detenerse a pensar antes de actuar, es una de las lecciones que he aprendido; además de que no te puedes fiar de nadie, simplemente haz lo que creas, lo que intuyas, y sobre todo no te arrepientas de ello. La vida pasa y con ella la gente, dejas de hablar con unos, conoces a otros, es un ciclo. Por eso creo que lo verdaderamente importante es ser sincero ir de frente, no dejar pasar las oportunidades y confiar en ti mismo. Te podrás caer 1000 veces sí, pero levántate 1001. Mira hacia delante y piensa que si no vives tu vida tal y como quieres que sea. Mírate al espejo y di: si soy yo como quiero ser y me importa una mierda lo que opine el resto, porque soy feliz y la gente que está a mi lado está feliz conmigo… eso es lo más importante.
No te preocupes por lo demás, al final cada uno tiene lo que se merece.
No quiero otros besos, ni otros abrazos, ni otro número de teléfono que me llame por las noche. Porque me encanta tu sonrisa, la adoro. Adoro tus abrazos y tus locuras. Me encanta que me hagas reír. Me gusta cuando me miras y cuando sonríes sin ninguna razón. Adoro que me hagas tus tipicas bromas, aunque me enfade y creas que las odio. Adoro tu forma de hablar, tus gestos, tu aroma, y tu colonia. Me vuelvo loca cada vez que me miras. Adoro que siempre que me enfade, vallas corriendo detrás mía y me agarres, y no me sueltes, por mucho que tire de tí. Me encanta tu forma de mirar, tu forma de decir te amo, o decirme simplemente me encantas. Adoro las cosas que te hago decir, y que no las dices por el simple hecho de tener verguenza, y que al fin y al cabo acabas diciendomelo. Me encanta estar contigo, porque se me olvida todo, absolutamente todo. Me haces sentirme la única chica más feliz del planeta, del universo... Supongo que en realidad, solo baste para demostrarte que me encantas, y me gustas. Todo esto me gusta solamente porque me lo haces sentir tú, y solo tú.

domingo, 3 de junio de 2012

Me gusta pensar que las reglas existen solo para romperlas, que el cielo de Enero es el más bonito, que las tardes de Julio son perfectas. Me gusta pensar que si existe el amor a primera vista, que las niñas ya no quieren ser princesas. Y me gusta, en especial, sentir que si puedes soñarlo puedes hacerlo. ¿Defectos? Muchos, demasiados. ¿Virtudes? Alguna habrá. Lo admito estoy loca, como una puta regadera, soy una chica normal y a la vez diferente, domino la imperfección, suelo estar en mi nube, me enamoro deprisa, me duele bastante. Me gusta la buena música, sonreír, soñar despierta, salir por las tardes, ir a mi bola, gastar hasta el último aliento, querer con locura, cantar hasta quedarme sin voz, bailar hasta caer rendida, hacer sonreír a la gente pase lo que pase, vivir como si cada día fuese el último. Y me gusta SENTIR TU SONRISA CERCA DE MI BOCA.
Soy incapaz de despedirme de ti por el simple hecho de tener miedo a no volver a verte nunca más. Las despedidas significan dejar de verte, dejar de olerte, dejar de sentirte, darte dos besos y esperar a la siguiente vez que nuestras miradas se crucen y las sonrisas nos cambien la tarde. Odio las despedidas, y también esas lágrimas que producen, los recuerdos que más tarde nos asaltan, y el malestar que provocan. Pero la despedida que más odio es la suya, tarde tras tarde o mañana tras mañana, incluso noche tras noche deseo que nunca llegue, pero siempre viene. Algún día llegará la definitiva, aunque no sabemos cuando, son las peores, aquellas que van siendo poco a poco y poco a poco traen muchas juntas. Dejaremos de besarnos y abrazarnos, luego de vernos, seguidamente de hablarnos y finalmente de recordarnos, aunque con más esfuerzo. Jodidas despedidas que siempre arruinan buenos momentos. Y ahora, ¿entiendes por qué no puedo despedirme de ti? Porque eres la única persona a la que no quiero dejar de besar nunca, la única que quiero ver despertar entre mis sábanas todas las mañanas, a la única que me apetece ver sonreír hasta el último segundo de mi vida, pero las despedidas siempre llegan. Ahora, empieza la cuenta atrás.